Es la primera que plantan los principales sindicatos españoles al gobierno de la nación, un gobierno que hasta hace muy pocos meses ha ido muy en línea con las pretensiones de los principales sindicatos.
Ahora, con la reforma del mercado de trabajo y las pensiones, las organizaciones sindicales han pasado de ser ‘amigos del gobierno’, para defender aquello que consideran una merma en los ‘derechos’ de los trabajadores.
En un país con un modelo económico desfasado, y con unas tasas de paro del 20% de la población activa, se ha esperado demasiado para manifestarse con una huelga general y da a pensar, que los sindicatos han convocado esta huelga general, con el beneplácito del gobierno de la nación, para intentar no perder la poca credibilidad que les queda, ante una clase trabajadora cada vez más olvidada, y cansada de apreciar la inacción que a estos les caracteriza.
Sera dañina para la economia y esperemos que no lo sea para los trabajadores que desean acudir a sus puestos de trabajo en una nacion libre.
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